Una aplicación Desktop (también llamada de Escritorio) es aquella que está instalada en el ordenador del Usuario, que es ejecutada directamente por el sistema operativo, ya sea Microsoft Windows, Mac OS X, Linux o Solaris, y cuyo rendimiento depende de diversas configuraciones de hardware como memoria RAM, disco duro, memoria de video, etc.
Una aplicación Web (también llamada aplicación en la nube o sistema web) es aquella que está instalada en un Servidor y su ejecución requiere disponer de un ordenador con conexión a Internet y de un Navegador (Google Chrome, Internet Explorer, Mozila Firefox, Opera, Safari, etc); lo anterior significa que una aplicación web puede correr sobre cualquier sistema operativo y cualquier plataforma, ya sea: Computadora, teléfono inteligente, tablet, etc.
Son programas diseñados para ejecutarse en un dispositivo móvil con un sistema operativo específico (siendo actualmente Android y IOS los mas utilziados a nivel mundial) y requiere descarga e instalación. Entonces, podemos definir un App, como una aplicación de software que se instala en dispositivos móviles o tablets para ayudar al usuario en una labor concreta, ya sea de carácter profesional o de ocio y entretenimiento. El objetivo de una app es facilitarnos la consecución de una tarea determinada o asistirnos en operaciones y gestiones del día a día.